domingo, 30 de agosto de 2015

LA CANCILLER VENEZOLANA DELCY RODRIGUEZ RECHAZO HOY RECIENTES DECLARACIONES DEL PORTAVOZ DEL DEPARTAMENTO DE ESTADO

Canciller venezolana califica de injerencistas declaraciones de portavoz estadounidense En este artículo: Colombia, Departamento de Estado, Frontera, Venezuela 30 agosto 2015 | 1 | La canciller venezolana Delcy Rodríguez aseguró que las medidas tomadas por el Gobierno de Venezuela protegen al pueblo. | Foto: Archivo. La canciller venezolana Delcy Rodríguez aseguró que las medidas tomadas por el Gobierno de Venezuela protegen al pueblo. | Foto: Archivo. La canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, rechazó hoy recientes declaraciones del portavoz del Departamento de Estado estadounidense, John Kirby, quien manifestó preocupación por el empeoramiento de la situación en la frontera colombo-venezolana. A través de la red social Twitter, Rodríguez calificó de injerencistas las afirmaciones de Kirby, y afirmó que las medidas implementadas por el Gobierno bolivariano obedecen al desbordamiento del estado colombiano para combatir el paramilitarismo y el narcotráfico. Afirmó que desde territorio del país vecino se promueve la desestabilización de la economía venezolana mediante el ataque a la moneda y el contrabando de combustible y productos de diversa índole. De igual forma, señaló que el presidente Nicolás Maduro adoptó las medidas necesarias para la protección del pueblo venezolano así como de los cinco millones y medio de colombianos que viven en esta nación. Apuntó que Venezuela es reconocida internacionalmente por tener una política migratoria profundamente respetuosa de los derechos humanos, especialmente de los colombianos que emigran por no encontrar en su país atención a sus necesidades. En ese sentido, rechazó la campaña mediática promovida desde esa nación en contra del pueblo y Gobierno venezolanos. La pasada semana Maduro ordenó el cierre de la frontera y decretó el estado de excepción en varios municipios del estado de Táchira, fronterizo con Colombia, luego de un ataque paramilitar contra una patrulla del Ejército bolivariano en ese territorio. De acuerdo con el Gobierno venezolano, esas medidas se implementaron para facilitan el combate contras mafias paramilitares y los grupos vinculados con el contrabando de extracción de gasolina, alimentos y medicinas que operan en esa área en detrimento de la población. (Con información de Prensa

¿OPOSICIÓN SÓLO POR LLEVAR LA CONTRARIA O SATISFACER A URIBE?

ELIGIO DAMAS Hay una vieja y pequeña historia, que no por esas cualidades deja de ser simpática y hasta chistosa. Resulta que durante la guerra federal, las pequeñas patrullas de militares combatientes, separadas del resto de la fuerza a la que pertenecían por esas contingencias propias de la guerra, simples asaltantes que transitaban por el llano y hasta algún solitario transeúnte, en algún paraje, se topaban de repente por los accidentes del espacio, con un ejército numeroso, del cual por intermedio del oficial respectivo se les increpaba, no sin violencia y soberbia, de la manera siguiente: -“¡Alto! ¿Quién vive?” El objeto de aquella demanda e interrogatorio era solicitar al o los sorprendidos, una consigna que les sirviese de identificación y hasta como pasaporte. Si el interrogado no acertaba a responder del gusto de quien le interrogaba, porque era del bando contrario o simple bandolero sin vínculo alguno con la fuerza con quien se encontraba era tomado como prisionero con todas las derivaciones que eso podía significar. Por eso, algún sorprendido optó por responder a quien le interrogaba y demandaba la consigna diciendo de manera firme e intentando impresionar: -“¡Di tú primero!” En este caso, quien así se comportaba quería asegurarse estar de acuerdo con el solicitante y hasta salvar el pellejo. Un viejo amigo, maniático discrepante, gozoso de conversar siempre en desacuerdo con su contertulio, solía empezar cualquier intercambio solicitando a los demás expusiesen sus opiniones sobre cualquier asunto, pero no para enterarse de ellas y lo que eso significa sino para elaborar su discurso en contra de lo que cada uno dijese. No le placía estar de acuerdo con nadie. Por eso él siempre parecía solicitar: -“¡Di tu primero!” La oposición pareciera actuar con la lógica de aquellos sorprendidos y advertidos de las consecuencias de las cuales eran objeto quienes se equivocaban; pero más como la de mi viejo amigo. Sólo que este actuaba de aquella manera por un sano ejercicio intelectual y procurar que la tertulia no resultase rutinaria. Es evidente, ya no hace falta más pruebas, que la oposición venezolana no puede hacer nada distinto a llevar la contraria al gobierno. No es que entre ellos no haya gente de talento capaz de hilvanar un discurso para los tiempos de conformidad a como miran el mundo y la sociedad venezolana, sino que no hay quien se atreva a hacerlo para no ser excluido. Lo único que los une es un irracional odio o desprecio por el gobierno que se manifiesta en estar siempre en desacuerdo con lo que haga. Esto es tan peculiar que si el gobierno decide algo conforme a lo que aquella había venido solicitando, los voceros de sus distintas tendencias o agrupaciones, sin ponerse previamente de acuerdo, salen por separado a manifestar su desacuerdo. Pero también “coinciden” en callar y hasta otorgar, frente a actos horrendos cometidos en su nombre, en lugar de deslindarse de ellos, como sería lo sensato, por temor a lo que “piensen los demás”. No creemos que las medidas relacionadas con la frontera colombiana tengan la capacidad y pertinencia absoluta para resolver los problemas puntuales que ahora confrontamos como especulación, inflación, devaluación al margen de la política cambiara oficial, paramilitarismo, secuestros, sicariato, desmedida delincuencia, contrabando y escasez, por sólo nombrar esos, pero no sólo son necesarias, por lo menos temporalmente, sino que las demandaba una buena mayoría de venezolanos, incluyendo la oposición que, en cierto modo, por no haberlas tomado antes y la supuesta existencia de un acta de nacimiento que Walter Márquez dice poseer, señala insistentemente al presidente de “colombiano”. Pero ahogado por los problemas y las agresiones de sectores derechistas de fuera, sobre todo del lado del país vecino y hermano, en connivencia con factores de adentro, quien gozan a su vez del respaldo y asesoramiento de importantes centros de poder internacional, lo que llegó al extremo del asesinato a mansalva de soldados venezolanos, el presidente Maduro, piensa uno, se vio obligado a tomar esas decisiones que pudieran parecer contradecir el espíritu bolivariano y chavista y que como ya dijimos, de un lado y otro de la opinión venezolana se estaban solicitando. En lo económico, el solo desmedido contrabando de gasolina, aunque se diga que hay sectores “enchufados” en la “movida”, justifica una medida heroica para ponerle coto a ese desaguadero. Bastó que el presidente Maduro anunciase esas acciones para que la derecha, que le acusa de colombiano y por ello usurpador del solio presidencial, ancestralmente partidaria de medidas chovinistas contra los millones de pobres que aquí llegan por la generosidad venezolana que se desbordó con el presidente Chávez y su proyecto político, se manifestase contraria a las medidas y trocase, en falsa pose, en favor de esa multitud siempre por ella despreciada y utilizada sólo para explotarla. Medidas que sólo buscan exterminar el estado de cosas que en la frontera está dañando los intereses nacionales, hasta integridad y derechos de los colombianos más humildes. Pero curiosamente, a quien se le tiene como promotor y primer responsable de esa diáspora colombiana de gente humilde de los últimos años, aparte de otros pecados, tantos que un gran número de funcionarios a su servicio cuando fue presidente están presos o siendo procesados por la justicia, se convierte en el portador del discurso opositor contra Venezuela en la frontera. Mientras eso acontece, la oposición venezolana aparece repitiendo los argumentos de aquél e identificándose con lo que él representa y contra lo venezolano. Por eso, la oposición no avanza. Su discurso anda detrás de lo que diga, haga o deje de hacer el gobierno o lo que es lo mismo para ponerse en contra. Pero también se deja percibir detrás de Uribe, lo que es todavía más grave. Aunque ella pretenda ignorarlo, el pueblo percibe eso, como también que nada tiene para él. Para ganarse al votante hay que ser original, audaz y, frente a los problemas, ofrecer soluciones, no esperar lo que el otro diga para llevar la contraria. Eso da una imagen pequeña, sin creatividad ni idea alguna frente al cúmulo de problemas y el asunto estratégico. No por casualidad, aquellos sorprendidos en una depresión de la sabana, en algún vericueto del camino, que replicaban a quienes le solicitaban la consigna respectiva diciéndoles: -“¡Alto! ¿Quién vive?”, respondían defensivamente: -“¡Di tú primero!” Recibían por respuesta un sonoro coro de carcajadas y los castigos habituales en aquellos casos. -- Publicado por Eligio Damas para BLOG DE ELIGIO DAMAS el 8/28/2015 11:22:00 a. m.

DESTINOS (I)

Destinos (I) Ciro Bianchi Ross • digital@juventudrebelde.cu 29 de Agosto del 2015 20:41:55 CDT ¿Cuál fue el destino de personajes que en un momento anterior a 1959 ocuparon planos de actualidad en la vida cubana? El tiempo no transcurre en balde y, por supuesto, a estas alturas ya murió la mayoría de ellos. De todas formas, rastrearlos y seguir sus pistas no siempre es fácil porque esa «celebridad» de la que disfrutaron pasó, en muchos casos, al más absoluto de los anonimatos. En otras ocasiones he abordado este tema y lo hago ahora, con muchas adiciones, compulsado por la solicitud de un lector. Será, por fuerza, una relación incompleta. No siempre logra uno enterarse de dónde está o qué se hizo gente que un día ocupó espacio en la crónica social o en las noticias del acontecer político. Empecemos por los presidentes. Entre dos ciudades El coronel Carlos Mendieta Montefur, presidente de la República entre enero de 1934 y diciembre de 1935, murió en La Habana, en 1960. Residía en Tercera, 1202 equina a 12, en Miramar, y se hizo famoso por su cría de gallos de pelea, los muy celebrados gallos Mendieta. Carlos M. Piedra, jubilado en 1959 del Poder Judicial, falleció, ya nonagenario, en su casa No. 661 de la calle D, entre 27 y 29, en el Vedado. No llegó a la primera magistratura; estuvo, sí, a punto de alcanzarla el 1ro. de enero del año mencionado, pero la Sala de Gobierno del Tribunal Supremo se negó a tomarle juramento y aceptó la designación hecha en la Sierra Maestra del también magistrado Manuel Urrutia Lleó. Meses después, en julio, renunciaba Urrutia. Buscó asilo en la Embajada de Venezuela y pasó a la de México cuando el país sudamericano rompió relaciones con Cuba. Murió en Estados Unidos. Carlos Prío Socarrás (74 años) se suicidó en 1977 en su casa de la Florida. Fue inhumado en el cementerio de Woodland Park, de Miami, donde también reposan los restos de los ex presidentes cubanos Carlos Hevia y Gerardo Machado. Su esposa, Mary Tarrero, quien vivía retirada desde la muerte de Prío, murió en septiembre de 2010. Ramón Grau San Martín (87 años) falleció en La Habana el 28 de junio de 1969. Poco antes de su muerte escribía en este mismo diario el periodista Mario Kuchilán: «Aún hoy vive en su “choza” de la Quinta Avenida y se mantiene lúcido y empecinado. Grau sigue igual. El mismo viejo socarrón de siempre; no se rehabilita ni se va». Militares y ministros El dictador Fulgencio Batista, quien usurpó el poder mediante un golpe de Estado en 1952 e implantaría un régimen sanguinario, murió en Marbella, España, en 1973, a los 72 años de edad. Se hallaba reunido con su familia cuando sufrió un infarto masivo. Está enterrado en Madrid, en la misma fosa donde inhumaron a su hijo Carlos Manuel, que falleció con 19. En la bóveda contigua fueron inhumados Emelina Miranda, su suegra, y el coronel Hernández Volta, uno de sus ayudantes. Marta Fernández Miranda, su viuda, murió en el 2006. Mucho antes, el 19 de junio de 1993, había muerto Elisa Godínez, la primera esposa de Batista. El general de brigada Roberto Fernández Miranda, jefe del Regimiento 7, Máximo Gómez, con sede en La Cabaña, y director general de Deportes, dio a conocer sus memorias bajo el título de Mis relaciones con el general Batista. Era hermano de Marta. «Panchín» Batista, hermano del dictador y gobernador de La Habana hasta el 31 de diciembre de 1958, se vio obligado a ganarse la vida en Miami como sereno. Andrés Rivero Agüero, el presidente electo en los comicios de noviembre del 58, perdió en una mala inversión lo que logró sacar de Cuba, y vivía de las entradas de su esposa, quien trabajaba como peluquera. Anselmo Alliegro, presidente del Senado, poseía en Miami, desde su exilio de 1944, casas de apartamentos y otros bienes que le permitieron vivir con cierta holgura. Murió el 22 de noviembre de 1961. Casa propia también tenía allí el senador César Camacho Covani, presidente del Partido Liberal en la antigua provincia de Oriente. Ministro de Justicia en el batistato, «Lulú» Camacho, como le llamaban, se creyó obligado a tomar el camino del exilio. Buscó amparo en la Embajada española y luego de pasar varios días en una instalación de esa sede diplomática, tuvo que enfrentar la circunstancia de que España no concedía asilo político. Volvió entonces a su casa, un apartamento del edificio marcado con el número 255 de la calle N. Tuvo suerte. Una mañana amaneció con la noticia de que el apartamento de los altos había sido alquilado como un anexo de la Embajada de Brasil. Hizo su maleta y solo tuvo que subir la escalera para encontrar asilo. Justo Luis del Pozo, el alcalde de La Habana, hizo la misma operación, pero al revés. Enterado de la fuga de Batista, tomó el ascensor en el noveno piso del edificio que habitaba. Llegó al segundo piso y estaba ya en la Embajada de Paraguay. El gran culpable El siniestro Julio Laurent, del Servicio de Inteligencia Naval —el hombre que asesinó a Jorge Agostini en plena calle, frente al hospital Angloamericano del Vedado y a la vista de los vecinos, y ultimó, asimismo, a Lydia y Clodomira—, trabajó en Miami como carpetero de un hotel de cuarta categoría. Y el no menos terrible teniente coronel Irenaldo García Báez, segundo jefe del Servicio de Inteligencia Militar y asesino de Oscar Lucero y de decenas de jóvenes revolucionarios, todavía en los años 80 laboraba como profesor en una escuela de segunda enseñanza, en West Palm Beach. El brigadier Dámaso Sogo Hernández salió de Cuba el 1ro. de enero de 1959 y se estableció en Miami, donde murió, como barbero. Era el oficial superior de Columbia —tenía entonces grados de capitán— cuando el golpe de Estado del 10 de marzo de 1952 y fue el hombre que abrió a Batista las puertas del campamento, lo que le valió el ascenso a coronel. Otro de los grandes culpables del zarpazo, que ayudó a consolidar con su nombre, prestigio y autoridad, el mayor general Eulogio A. Cantillo Porras, fue condenado, en 1959, por su participación en ese suceso. En Estados Unidos se vinculó a planes contrarrevolucionarios, en particular al llamado Plan Torriente. Murió olvidado por amigos y enemigos. Francisco Tabernilla Dolz, general de cinco estrellas y jefe del Estado Mayor Conjunto, no le ganó una sola escaramuza a los barbudos. Pero no más salió de Cuba, en 1959, no se cansó de culpar a Batista de todas las desgracias del Ejército, además de las propias. Él y sus hijos llegaron a pagar al periodista José Suárez Núñez, batistiano hasta la víspera, un libro contra Batista, El gran culpable. Toda una tribu que se enriqueció gracias a sus altos grados en las fuerzas armadas y al negocio de contrabando que operaban en naves de la fuerza aérea cubana. Uno de los reproches que el viejo Pancho hace a su antiguo jefe es el dinero que no pudo sacar de Cuba. El mismo reclamo que le hará el ex vicepresidente Guas Inclán, quien lo acusa de haber llevado a la indigencia, con su fuga, a la «clase política» cubana. El escribidor no cree del todo lo de la platica dejada en Cuba, pues el general de brigada Francisco Tabernilla Palmero —alias Silito, hijo del viejo Pancho—, como secretario militar de Batista, supo de la fuga con suficiente antelación. Él copió en unas hojitas color violeta los nombres que el dictador le dictó para que estuvieran listos a la hora de la partida. Jefe del Regimiento Mixto de Tanques 10 de Marzo y de la División de Infantería Alejandro Rodríguez, con sede en la Ciudad Militar de Columbia, el general Silito dirigió una escuela militar en la Florida. Dice el coronel Irenaldo García Báez en una entrevista publicada en la revista Réplica, de Miami, en febrero de 1972: «Pero se le apretó el cuadro y trabaja en el jai alai y como bookkeeper (contador) en una fábrica de muebles». En la misma entrevista, Irenaldo revela que ya en los finales de la noche del 31 de diciembre de 1958, por orden de Batista, volvió a la sede del Servicio de Inteligencia Militar y quemó todos los papeles comprometedores, sobre todo aquellos que dejaban constancia de los nombres de los agentes batistianos infiltrados en partidos oposicionistas y organizaciones revolucionarias. Regresó a la Ciudad Militar y en la oficina de Silito coincidió con el general Cantillo. Asegura: «Cuando me vio, me dio un abrazo y me dijo: “La guerra terminó. Al fin… Gracias a Dios habrá tranquilidad”. Me interesé por conocer nuestra situación, y él explicó: “Ustedes marchan al extranjero y en meses regresan. Se les respetarán propiedades y cuando regresen se retiran y a vivir felices”». El coronel Florentino Rosell y Leyva era el jefe de la Ingeniería del Ejército y, por tanto, del tren blindado. Murió en Miami enormemente rico. El general Alberto Ríos Chaviano, el carnicero del cuartel Moncada en 1953 y concuño del viejo Tabernilla, salió de Cuba días antes de la caída de la tiranía, cuando Batista lo destituyó de su mando militar en Las Villas y lo designó agregado militar en la República Dominicana. Derrocada la dictadura, se estableció allí como ganadero. Ramón Tabunda, un cubano que se fue después, de Caibarién, y que llegó a convertirse en el «zar de la carne» en ese país caribeño, tenía una opinión pésima acerca del ex militar. Decía: «Tramposo. Mala persona, mal amigo, mal negociante. Le comprabas 500 cabezas y si podía te robaba diez. Pensé en boicotearlo para que no pudiera salir de sus reses ni regalándolas, pero, por suerte, murió». El coronel Rego Rubido, el hombre que rindió la plaza militar de Santiago de Cuba al Ejército Rebelde y fungió, reconocido por la guerrilla, como último jefe del Ejército, salió de Cuba en 1959 para ocupar, por designación del Gobierno Revolucionario, un cargo diplomático en Brasil. Desertó e instalado en Puerto Rico, vendió guarapo con un trapiche ambulante por las calles de San Juan, hasta que el coronel Ramón Barquín lo rescató y lo llevó a trabajar a su escuela. Coda No acaba aquí la lista, pero sí el espacio. En una entrega posterior, el escribidor abordará el final del coronel Orlando Piedra, jefe del Buró de investigaciones, muerto a consecuencia de la golpiza que le propinaron en el asilo de ancianos donde se hallaba recluido. Tratará de otras figuras civiles y militares del batistato, como Santiago Rey y Guillermo de Zéndegui, y los brigadieres generales Hernando Hernández y Julio Sánchez Gómez, entre otros. Y también de personas que nada tuvieron que ver con Batista: políticos como el ex candidato presidencial Carlos Márquez Sterling y el ex senador Emilio (Millo) Ochoa, que pudo haber sido presidente de Cuba y fue taxista y mensajero en Miami; un hombre de acción como Mario Salabarría, protagonista, en 1947, de la masacre de Orfila; una mujer de sociedad, como la condesa de Revilla Camargo, y hombres de empresa como Julio Lobo. (Continuará) -- Ciro Bianchi Ross cbianchi@enet.cu http://wwwcirobianchi.blogia.com/ http://cbianchiross.blogia.com/

miércoles, 26 de agosto de 2015

DOS MENTALIDADES EN PUGNA

Dos mentalidades en pugna por Yndamiro Restano El señor Donald Trump ha aportado la tesis represiva como panacea para los problemas de migración que afectan a Estados Unidos y al mundo en general. Corta y bota viene siendo la propuesta del Sr Trump. Sin embargo, el president Barack Obama, está trabajando este tema, tan sensible, en profundidad. El Presidente despliega una estrategia que va directamente a las causas, al revivir de cierta manera la propuesta del fallecido Presidente Kennedy, me refiero a la “Alianza para el Progreso”. El tiempo le ha dado la razón al Presidente Kennedy. A Epicuro también el tiempo y la vida le dieron la razón: La gente busca el placer y huye del dolor. Por supuesto, el filósofo no se refería estrictamente a placeres primarios sino a los placeres superiores de nuestra especie; a los placeres que producen la filantropía y la búsqueda de la verdad. Sin embargo, esta afirmación epicureana ayuda a un acercamiento inteligente de los problemas tanto individuales como sociales de esta Nueva Epoca en que el mundo se va urbanizando a través de la información mediática ya casi omnipresente a nivel mundial. Obviamente, la vida urbana tiene exceso de información, pero tiene la debilidad de la falta de tiempo y la ausencia de observación de la Naturaleza. Un obrero ferroviario tiene más información que un campesino, pero no tiene ni el tiempo ni el intercambio mental con la Naturaleza que lleva al campesino a buscar profundidad analógica en sus puntos de vista. NO en vano le llama el poeta a los campesinos “los analfabetos cultos”. La gente busca el placer y huye del dolor, decía el filósofo. Donald Tromp, piensa que por medio de la repression y causando más dolor, se van a resolver los agudos problemas de migración que tienen América Latina y otros paises pobres y/ o en guerra ,que por supuesto, afectan sensiblemente también a los países altamente desarrollados. El Presidente Obama quiere encarar esta problemática concibiendo a los Estados Unidos como una Potencia Etica, que ayude al resto del continente a obtener una vida más agradable en sus propios países. Es decir Obama quiere una liberación estructural de América Latina, que produzca como resultado sociedades democráticas, donde se concilien el liberalismo económico y la construcción de un Estado de Bienestar para todos y por el bien de todos. Es cierto, que cuando se habla en serio: Martí es ineludible.

lunes, 24 de agosto de 2015

RELATOS DE MEDICOS CUBANOS EN AFRICA LLEGAN A ARGENTINA

Relatos de médicos cubanos en Africa llegan a Argentina Por Martin Hacthoun Buenos Aires, 21 ago (PL) "Historias secretas de médicos cubanos", el libro del periodista y escritor Hedelberto López Blanch, suscitó el interés y simpatía entre quienes lo escucharon presentarlo en esta capital. La obra recopila los relatos hasta hace poco inéditos, guardados en el silencio de la humildad y la modestia de 15 galenos que cumplieron el sagrado deber de salvar vidas entre guerrilleros y civiles en varios países africanos, misiones por años cobijadas en el secreto. De paso hacia Namibia donde presentará otro libro, López Blanch compartió anoche en la Casa de Amistad Argentino-Cubana con quienes se acercaron a conocer sobre esta nueva obra que resalta la participación de profesionales cubanos de salud en circunstancias de guerra. Lo motivó hacerlo el interés de dar a conocer y salvar para el conocimiento de futuras generaciones estas misiones cuyos protagonistas derrocharon humanismo con una gran carga de valor y altruismo "con el único interés de cumplir la misión encomendada", señaló el autor cubano. El libro se conforma de entrevistas a 15 médicos que cambiaron su bata blanca por el uniforme de faena, no solo para acompañar a guerrilleros que luchaban por la liberación de sus países, sino también atender a civiles víctimas de la miseria y el avasallamiento colonial. Son relatos conmovedores que alguien, como dice el escritor "tenía que recopilar y dar a conocer"; en efecto, son realmente hazañas de hombres que se entregaron con total desprendimiento sin percatarse que aportaban a la construcción de un mundo mejor. Ya falleció la mitad de quienes contaron a López Blanch sus secretas misiones y vivencias en esa colaboración internacionalista en el corazón de Africa; ahí estriba el valor de esta obra. La presentación se convirtió en un ameno diálogo sobre el papel que jugó Cuba en la defensa y consolidación de la independencia de Angola, en la liberación de Namibia y el derrumbe del apartheid en Sudáfrica. En el conversatorio surgió la idea de publicar en Argentina "Historias secretas de médicos cubanos", y se propuso hacerlo la joven cooperativa editorial Acercándonos Ediciones. También se propuso proyectar un filme sobre la misión internacionalista cubana en Angola y entablar un debate sobre presencia poco conocida entre ciudadanos fuera de la isla. Entre los galenos que cuentan sus duras vivencias figuran los doctores Rafael Zerquera, quien acompañó al comandante Ernesto Che Guevara al entonces Congo Leopoldville, y Rodriguo Álvarez Cambra, director hoy del hospital de especialidades ortopédicas Frank País. También están reflejados los relatos de las doctoras Zoila Italia Suárez y Sara Perelló, y de sus colegas Pablo Zerik, Omar Prudencio Martínez, Pedro Luis Pedroso y Julio Tiburcio Hernández, quien además de colaborar en tierra africana brindó su ayuda médica en Vietnam.

domingo, 23 de agosto de 2015

¿AGONIZA EL IMPERIALISMO? REFLEXIONES ABSURDAS ANTE EL IMPULSO ABSURDO DE LA DIVISIÓN. PARTE I

ELIGIO DAMAS Llevaba varios días sin escribir. Unos pocos amigos, hasta distantes entre ellos, han tenido la gentileza de comunicarse conmigo para saber el por qué. A todos les dije más o menos lo mismo; sin proponérmelo, estaba tomando como por inercia parte en un debate que ponía como centro de mis críticas al gobierno y olvidaba los zarpazos del enemigo. Hasta sobre el caso Cuba, donde observo a muchos como embelesados y celebrando un triunfo que no percibo, pese al esfuerzo que hago para lograrlo y sólo veo nubarrones, he hecho advertencias que, de repente, son entendidas por quienes siempre han estado con uno, como inadecuadas y contrarias al interés del pueblo antillano y su revolución. Pero resulta que ellos también creen que Cuba ha obligado al imperialismo estadounidense a sentarse a dialogar civilizadamente y reconocerle derechos antes negados. Yo no sé cuáles, por mucho que me esfuerzo, pero ellos si los ven claritos. Es decir, por donde intentase insertarme o introducirme terminaba asomando la cabeza en el mismo sitio. Por este drama y mi firme disposición a no participar en divisiones del movimiento popular pese a que mis ideas o aquellas que crea pertinentes no prevalezcan, he decidido intentar ayudar a que se imponga la sensatez o encontrarla y que quienes discrepan sobre algunos asuntos coyunturales, lo que no quiere decir sean de poca importancia, sepan encontrar los puntos fundamentales sobre los cuales acordarse y por encima de todo, identificar con propiedad al enemigo fundamental e histórico. Por ahora, me propongo hacer algunas reflexiones sobre el imperialismo; asunto sobre el cual sé poco, pero esa circunstancia no me invalida para comentarlo, sabiendo que como docente que soy, de alguna manera a alguien puede servirle y ayudar. Sobre todo porque pareciera que seguimos viendo al fenómeno político económico mundial como en la época de Lenin, de cuando habló del asunto y hablábamos luego “del imperialismo yanqui” y estuviésemos convencidos que con él, esa versión, ahora en crisis, estuviera a punto de desaparecer o hundirse el capitalismo y por supuesto el imperialismo. En veces, por el usual lenguaje de muchos años y la experiencia particular de cada pueblo, se tiene una visión unilateral del fenómeno y obviamos su naturaleza verdadera y que su conducta, la propia de un estadio elevado de la acumulación capitalista, pudiera en determinadas circunstancias parecernos diferente. El imperialismo hay que conocerlo bien para enfrentarlo mejor. Hay cazadores muy crueles, los de la vieja escuela; de las trampas de la vieja usanza, destructiva y dolorosas y los hay quienes son sutiles, porque la coyuntura que enfrentan les obliga a ofrecer una cara más generosa. Porque el imperialismo de hoy tiene varias facetas. Hay quienes por la fuerza de la costumbre han internalizado que el imperialismo es sólo EEUU y percibiendo, como percibe también uno, que hoy parece una fiera seriamente herida, lo que la hace mucho más peligrosa, no obstante suspira pensando que con ella desaparecería el imperialismo y quedaría expedito el camino al socialismo. Por algo, un hombre experto y comprometido como Silvio Rodríguez, llegó a expresar con euforia “¡Cuba sí! ¡Yanquis también!”. Para agregar luego “Nunca pensé viviría este día. Ahora las cosas deberán ser mejor que antes”. Es posible, no sé, habría que preguntarle, si contrario a quien esto escribe, el gesto gringo de apresurarse a abrir una embajada en su país, sea para él un signo de buena voluntad. Es básico, muy elemental, “Imperio” e “Imperialismo”, son dos categorías diferentes. Los imperios como el napoleónico, español, francés, británico, ruso del tiempo de los zares, portugués y hasta el chino, tenían sus particularidades como la anexión de territorios ajenos y las consecuencias pertinentes en el ámbito político y económico*. La palabra que se usa sistemática y acríticamente sirve para crear un espejismo. Identifica al imperialismo, el gran enemigo de la humanidad y del futuro de la existencia pacífica y en justicia con un espacio. Pero también pudiera servir para sustentar un proyecto que no necesariamente representa el legado popular y el que nosotros llamamos de Chávez. El imperialismo es otra cosa; es la etapa de la abundancia y hasta exceso de capital acumulado en un área, sobre la base de la explotación del trabajo de los humanos en ella, que se desplaza a otros territorios o espacios, cercanos o lejanos para invertir en ellos produciendo los resultados conocidos, como explotar también la fuerza de trabajo, aprovecharse de las materias primas, del talento, estructuras y maniatar a quienes fungen de administradores de la “independencia” y, disponer, por mecanismos a veces sutiles, de la voluntad de ellos y de las riquezas de los espacios que invaden. En fin, trasegar las riquezas a los pocos amos del capital en detrimento de las mayorías. El capital, proceda de donde proceda es así, de la misma naturaleza, aunque en algún momento, como solía decir mi suegro, refiriéndose a otras circunstancias, “se vista de cura”. No hay imperialismo bueno. No es cosa de cerrarse ante el diablo, pero tampoco de entregarle el alma. Hablar de imperio por imperialismo aparte de anti histórico, es peligroso porque pudiera generar una idea falsa y conducir a la comisión de errores fundamentales. Con razón, alguien dijo que el único imperio existente es el británico y los Estados imperialistas ahora son o pudieran ser bastantes. No sería la primera vez que los capitales y capitalistas se alineen en grupos o legiones diferentes y hasta entren en conflictos. La mayoría de las guerras de la humanidad desde la llamada era moderna han sido enfrentamientos entre capitalistas no para defender utopías o normas morales sino vulgares intereses capitalistas. Los conflictos entre el capital son tan comunes como como entre el capital y el trabajo, aunque obedezcan a distinta naturaleza. Pese la caída del muro de Berlín, la disolución de la URSS y la excesiva debilitación, si no es pertinente decir, abandono de los proyectos socialistas de Eurasia y el Asia, lo que también incluye al Vietnam de Ho Chi Minh, para dar paso a nuevos modelos capitalistas, las tensiones militares lejos de disiparse aumentan y el armamentismo sigue siendo la gran fuente de acumulación de capital. El fin de la “guerra fría”, la caída del muro de Berlín, la disolución de la URRSS, la división de naciones que dentro de esa llamada “Unión” extra nacional aparecían unidas, el hundimiento de los gobiernos del Pacto de Varsovia y hasta de la orgullosa y próspera Yugoslavia, para dar paso a un mayor número de naciones capitalistas, por lo que se habló del “fin de la historia”, en primer término, pareció significar un triunfo del modelo capitalista frente a lo que entonces se llamó el socialismo real, que en nuestra opinión, no importa lo que por ello se me diga, no fueron sino “malas caricaturas” de lo que el marxismo habló de socialismo, sin dejar establecido o por sentado, por fundamentos filosóficos, que había modelo alguno, porque sus constructores, los pueblos, no se habían puesto de acuerdo nunca. Pudiera uno decir que se apuró en demasía el cocimiento, precisamente por inexperiencia, no se usaron los condimentos pertinentes, desperdició el conocimiento, deseo, habilidades, sabiduría de la convivencia de las grandes multitudes, sustituidas por “el toque mágico” de los predestinados. Después de esos acontecimientos, de sus cenizas, lejos de aparecer gobiernos con un proyecto o disposición novedosa para profundizar el socialismo, tanto en Europa del Este como en Eurasia, surgieron formas capitalistas no estatales y hasta capitalistas con capitales sin que hasta ahora uno sepa de dónde. Hay quienes opinan, hablo de académicos, que unos salieron de los bolsillos gringos y europeos del oeste y otros de lo que ahora llamaríamos “enchufados” en los gobiernos comunistas desaparecidos, quienes mantuvieron sus fortunas encaletadas. Rusia, la de Putin, por sólo nombrar una, es una nación capitalista y eso no tiene duda alguna, pese a que todavía en algún sitio mantenga, por razones de respeto a la historia, una estatua o busto de Lenin, como podrían conservar en iguales condiciones, recuerdos del Zar Nicolás. En Alemania, específicamente en Berlín, existe un muy visitado museo en honor Karl Marx. Los chinos, no se han desprendido de los recuerdos de Mao y hasta le rinden honores aunque su escuela y poesía no sean la expresión de lo que ahora China es, una enorme potencia y en crecimiento desmedido que exporta capitales y procura desplazar competidores sin dejar a un lado en esencia la lógica del capital, aunque utilicen procedimientos apropiados para los tiempos. No es un pequeño país, con pocos capitales de los cuales alguno exporta o coloca más allá de su frontera; es un gigante y con un alcance impredecible. Pero en la China misma, por lo poco que uno sabe, pese al hermetismo pero también por la imposibilidad de ocultarlo todo y tapar cada resquicio, se sabe que subsisten un gigantesco capital estatal al lado de enormes fortunas personales que uno tampoco, después de la gesta y lo estatuido por Mao, siquiera sospecha su procedencia. No es absurdo agregar como comentario que todo eso acontece pese se diga y se informa que la ley estatal China parece como bastante dura contra quienes se apropian indebidamente de los recursos del Estado. El capitalismo tiene su dinámica, sus leyes y hasta sus hábitos. La lógica del capitalismo es la misma en cualquier espacio. Sin importar su procedencia, su norte es ganar y multiplicarse. Para decirlo en criollo, en su afán de lograr sus fines, comportarse de acuerdo a su manera de ser, no se para en hueso. No hay capitalismo bueno y capitalismo malo. Lo que pudiera haber son estilos o estrategias distintas que varían y variarán según las circunstancias. Los ingleses, hablando de imperios, en veces se ofrecían como buenos ante los americanos que combatían a España, tratando de “pescar en río revuelto”; ahora grandes capitales tratan de penetrar donde antes lo habían hecho o en la deseada amplitud, y para lograrlo es necesario, como cualquier vendedor, hacer la mejor oferta y poner la más graciosa de las caras. Ahora mismo, la Exxon Mobil pudiera presentarse ante el gobierno de la ex Guyana Inglesa, como la aliada generosa, impoluta y desinteresada para salvarla de las “garras imperiales” de Venezuela. Pero lo que quiero destacar es lo que cualquiera medianamente informado sabe, sino que pese a lo que muchos no creen y hasta no quieren ver, el capitalismo está vivo y coleando. Que alguien, sin que en eso no le falte razón, vaticine, repita o como quiera que sea, afirme que el modelo capitalista asociado a EEUU o que este país, como centro que ha sido del capitalismo mundial está en decadencia, crisis y a punto del colapso, no significa que el modelo capitalista lo esté y lo que es peor, al borde la desaparición para dar paso a un modelo diferente. Lo que pareciera ser cierto, y hay evidencias de distinta naturaleza que conducen a pensar eso, EEUU es una potencia en decadencia; tanto que sólo por la fuerza, la promoción de guerras por demás injustas, apropiación indebida de lo que no le pertenece, una severa crisis que cada día aminora su crecimiento, falta de recursos energéticos y hasta agua, soportada por la industria bélica y una economía pendiente de los recursos que no le pertenecen, mientras otras potencias capitalistas de más empuje le compiten. Pero al mismo tiempo, esas “otras potencias”, con China a la cabeza, avanzan sin descanso y con empuje y como capitalistas al fin, comienzan a colocar sus capitales en espacios donde antes EEUU mantuvo un dominio indiscutible. El capital puede estar aquí o allá, bajo una bandera u otra pero en definitiva su lógica será la misma. Es decir, la bandera o pendón del imperialismo pudiera cambiar de sitio y hasta de procederes por los momentos, es cuestión de amansar al mercado, pero el capitalismo y el imperialismo vivos están y por tiempo. Es posible, es lo usual, que esas potencias ahora emergentes, que son varias, si se les puede llamar a todas así como China, India, Rusia, por sólo nombrar tres, aunque el número es mayor, aparezcan ante nosotros, los países pequeños, esos que el maestro Juan José Arévalo llamó “las sardinas”, con ofertas más generosas. Sería lo que los expertos en el ramo llamarían atractivas “formas de venta” o generosas políticas de comercialización o penetración, como más humanas y comprensivas, menos leoninas y expoliadoras que aquellas de la vieja usanza, que usaron desde el principio porque no tenían competencia y sus víctimas experiencia alguna o por dirigentes tristes personajes con las agallas demasiado inflamadas y, para completar el cuadro, a nadie a quien rendirle cuenta. El capitalismo no está muerto. Lo que pudiera verse agonizando y con sus “armas melladas” y hasta demasiado conocidas sus mañas, que ya a pocos engañan, es aquel que se asocia a EEUU. Pero el capital no tiene patria, cédula de identidad, pasaporte ni sabe de fronteras. Se va de aquí para allá según le convenga y logre su propósito. No importa, ha aprendido que para reponerse puede empezar ganando poco, saludar y hasta abrazar a quien en otras circunstancias no haría; sabe esperar el momento. El capital como la sangre, sobre todo la del mismo tipo, puede recibir donantes y tributarios y fortalecerse, poco importa si antes estaba allá y ahora acá; antes con unos socios y ahora con otros; puede cambiar de estilo por momentos, sabe bien que llegará el momento de volver a los procederes de antes. Sabe bien que unas son de cal y otras de arena. El bloque europeo capitalista, también está en crisis. Lo que acontece en Grecia, a quien ahora intenta “salvar” con un purgante que antes han aplicado dos veces sin que mejore el enfermo; en España y Portugal, por sólo nombrar esos tres de la Zona del Euro, revelan la magnitud del problema y la amenaza que se cierne sobre el bloque que a su vez es socio de EEUU. De donde uno pudiera creer con fundamento que la OTAN pudiera estar convirtiéndose en una asociación o manada de burros, arruinados, quebrados de las patas, armados y sin duda eso les hace más peligrosos. Pero nunca que el capitalismo agoniza, pues es evidente que retoña con fuerza en otros espacios. ¿Acaso los BRICS no son exhibidos como un refulgente alternativa? ¿Y no son ellos un grupo de países capitalistas en ascenso? ¿O no? ¿Es pertinente pensar que nuevos grupos de países capitalistas poderosos, ya en los andares propios del capitalismo, exportación masiva de capital, tendrían en el futuro una conducta diferente a lo que en esencia califica la lógica del capital? Dejo esto hasta aquí, mediante lo cual espero haber dicho lo que pudiera decir de otra manera quisquillosa y hasta divisionista. Pero precisamente, lo que interesa es mantenernos unidos porque el capital, ese que pudiera tener la cola en una parte del mundo y la cabeza en otro, por lo mismo que aquí me sonríe y allá me gruñe y hasta muerde son saña, le conviene que nos dividamos y tomemos o pensemos que estamos viendo la cabeza y en verdad sólo es la cola. Pero haberlo dicho es bueno porque pudiera servir para reorganizar nuestros pensamientos y discusiones. En la próxima hablaremos del por qué nos dividimos por asuntos que no lo justifican. ¿Por qué nos negamos a discutir lo que nos separa si no es tan profundo ni se ha tocado lo estratégico? ¿Por qué nos organizamos como soldados, unos dándoles las espaldas a otros para no escucharnos? Hablemos de lo que nos une y conviene. Pensemos como dice Héctor Navarro, “prefiero este gobierno a uno de López o de María Corina”. ¿Es difícil que entre quienes discrepamos podamos llegar a acuerdos? ¿Eso no lo hizo posible Chávez? ¿Acaso volvemos a la vieja, pequeña, grupal y egoísta práctica de la vieja izquierda? ¿Sólo quienes me rodean, forman mi primer anillo tienen la verdad y son dignos de confianza? ¿Es verdad que quien siempre me aplaude es mi amigo y digno de tomarle en cuenta? ¿Discrepar significa estar en contra? Por último, ¿es necesario porque discrepo, no logro hacerme oír, con lo que eso significa para mí, no se hagan las correcciones que reclamo, salir a colocarme en la acera de enfrente y confundir al gobierno con el enemigo fundamental de mis luchas de siempre y pertinentes a mi compromiso histórico con el movimiento popular? De eso hablaremos luego. *Caso particular pareciera aquello que los árabes llamaron “Califatos”, como el de Córdova, en la España andaluza. Allí estuvieron ochocientos años. Dominaron políticamente. Dejaron una rica herencia cultural y arquitectónica inevitable como las mezquitas y la Alhambra en los alredores de Granada. Costumbres derivadas de su simple larga permanencia misma, pero también supieron respetar muchos valores tradicionales de la cultura española frente, a los cuales, como la religión y la lengua, mantuvieron profundo respeto. -- Publicado por Eligio Damas para BLOG DE ELIGIO DAMAS el 8/19/2015 03:15:00 p. m.

DE ACUERDO EN DEJARNOS DE TRATAR COMO ENEMIGOS, SIN RENCORES PERO PREOCUPADOS

ATENCIÓN FRANK De acuerdo en dejarnos de tratar como enemigos, sin rencores, pero preocupado… http://www.poresto.net/admin/yucatan/mod_secciones/fotos_titulos/thumbs/img_1440305994_4c990d882fa3be7a2842.jpg CRÓNICAS CUBANAS, Por Félix Sautié Mederos, Después de 54 años sin relaciones diplomáticas, caracterizados por confrontaciones, agresiones y bloqueos, nuevamente se ha izado la bandera norteamericana en el Malecón de La Habana. Ha sido realmente un gran acontecimiento significativo de los Siglos XX e incluso considero que también del XXI, casi impensable en el pasado inmediato; quizás de los más destacados, que pasará a la historia de las dos américas. No exagero en esta apreciación que puedo plantearla hoy desde La Habana, donde viví la ruptura de relaciones diplomáticas con todas sus consecuencias posteriores y he acabo de vivir su restablecimiento con la esperanza de lo que podría significar. Confieso que muy a pesar de que siempre pensé que algún día con otras condiciones y circunstancias iba a suceder este restablecimiento, nunca llegué a considerar y ni siquiera a imaginármelo que lo iba a poder ver en vida; tal y como acabo de verlo y de vivirlo. Siempre lo había visto como algo que necesariamente iba a suceder, pero muy lejano en el tiempo; y, definitivamente sucedió, y me congratulo de haberlo podido apreciar hace algunos días desde mi Rincón de Centro Habana. Las cosas del tiempo, del peregrinaje existencial y de la historia muchas veces nos sorprenden; y a mí personalmente me ha sorprendido este hecho que espero que sea para bien de la población y, que el posible mal que pueda continuar latente dado algunas intenciones enunciadas o más bien esbozadas, aunque continúe, tenga otras dinámicas menos agresivas, más soportables y que podamos continuar venciéndolo para que el pueblo pueda a su vez algún día vivir en paz plena y no tenga que soportar a “tirios” y “troyanos” unos contra los “enemigos” y otros a favor de ellos. Comprendo que quizás haya quien no me entienda, o quiera no entenderme, o tenga miedo entenderme, o su oportunismo le aconseje no entenderme en esta contraposición de tirios y troyanos que planteo; en definitiva lo lamento si no me entienden. Eso es un problema de ellos y no mío... En las actuales circunstancias y coyunturas que estamos viviendo con la apertura de una Embajada norteamericana nuevamente en La Habana, así como con la visita a Cuba de un Secretario de Estado de los Estados Unidos, la primera en 70 años, marcan el inicio de una nueva era no menos compleja que la anterior, pero quizás más civilizada y vivible tal y como espero que sea, sobre todo si se respeta el planteamiento del propio Señor Kerry que me permito parafrasear porque concuerdo plenamente con ello, de que somos los propios cubanos los responsables de definir y realizar cualquier cambio que se produzca en Cuba. En este orden de pensamiento debo decir abiertamente, que considero que nadie en particular debería cantar victoria ni asumirse como paradigma y/o vocero de lo realmente justo por causa de este restablecimiento de relaciones diplomáticas, lo afirmo así por respeto al pueblo cubano de a pie quien es verdaderamente en mi opinión, quien ha triunfado en este intermedio de tiempo muy parcial aún porque estamos ante un proceso largo y muy complicado; así ha sucedido por su resistencia ejemplar sin poderes, sin reconocimientos, siempre castigado por quienes han querido vencerlo por hambre y desesperación , mientras que otros, los burócratas que han sabido aprovecharse de la condición de “Plaza Sitiada “ en que hemos vivido desde aquella ruptura a la fecha, se han encargado de hacerle sentir su poder, su autoritarismo, sus inculpaciones y regaños constantes, unidos a su triunfalismo sin fundamento objetivo alguno que pudiera avalarlo, incluyendo sus desatinos que han empeorado las cargas de lo que por sí ya era muy pesado. Me refiero a las cargas del bloqueo externo que son intensificadas por causa de un bloqueo interno de prohibiciones absurdas, exclusiones reiteradas y atrasos al desarrollo científico-técnico que implican las nuevas tecnologías de la comunicación propias del Siglo XXI, no justificados por otra cuestión que no fuera mantenerse en las cúpulas de la sociedad contra vientos y mareas. En estas mismas circunstancias que han surgido en la actualidad que comento, rechazo plenamente los rencores sostenidos que algunos han comenzado a manifestar desde sus concepciones de enfrentamiento a ultranza y ciego, como si ellos fueran los únicos que tuvieran la razón y la posibilidad de erigirse en jueces dueños de la verdad absoluta en capacidad de dictar sentencia “urbi et orbi” hacia quienes no piensan igual que ellos e incluso condenando también a quienes hemos entendido que las realidades son las realidades y que como se ha planteado no partimos de una actitud anti norteamericana, porque siempre ambos pueblos hemos sido y somos vecinos hermanados por la historia y la geografía, pero que en cambio nos afirmamos en un sentimiento antimperialista. Eso no es nuevo, de que muchos nunca hemos sido antinorteamericanos, pero sí anti imperialistas. Si hay quienes no lo sabían aún, sépanlo ahora porque ha llegado la “hora de los hornos”. Para ello debería recordarse la historia de las dos américas de conjunto porque la historia es la historia; y Nuestra América, está cuajada de intervenciones por la fuerza de los Estados Unidos en función de sus intereses imperiales, que nada han tenido que ver con su propio pueblo muchas veces discriminado y olvidado por sus propios gobernantes, lo que tampoco deberíamos olvidar. Si la actitud del actual Gobierno de los EU es respetar el derecho de nuestro pueblo a la autodeterminación, bienvenidas sean relaciones diplomáticas; y estoy de acuerdo y las apoyo plenamente, aunque haya personas detenidas en el tiempo que no entiendan este pensamiento y las actitudes que le son consecuentes en los actuales momentos; porque la vida está en movimiento perenne y quien no lo comprenda así y no actúe en consecuencia, se quedará atrapado y prisionero por la historia de un pasado realmente oneroso, sin entender el presente y menos aún el futuro que se abre con este hecho trascendental. Debo decir además, que si bien he confesado que todo me ha sorprendido y que no lo esperaba ver, también quiero añadir que estoy de acuerdo en que haya sucedido, y en que comencemos a transitar por la nueva etapa sin rencores ni odios malsanos que podrían corroernos por dentro si les diéramos razón de ser y/o alientos; pero también quiero añadir que me siento preocupado porque se abre ante nosotros un futuro muy complicado en el que no podemos darnos el lujo de equivocarnos porque podríamos precipitarnos definitivamente al abismo tan anunciado que hace tiempo estamos bordeando. Pienso todo esto y lo planteo muy en especial cuando vivo en la etapa final de mi peregrinaje terreno, porque con 77 años cumplidos no podría esperar otra cosa que no fuera la culminación de mi existencia tal y como expresé en una de mis últimas crónicas publicada por mis 77 años (1) cuando afirmé que la mayor parte de mi vida ha transitado por un tiempo de sueños, breves y endebles realizaciones, dolores físicos y espirituales colmados por amargas frustraciones, que bien pudieran reiterarse de nuevo por causa de los tirios y troyanos de la nueva era; a quienes me he referido anteriormente. En estas circunstancias antes de terminar mi crónica quiero expresar que estoy de acuerdo con algunas cuestiones que muy lucidamente ha planteado Dagoberto Valdés, sobre este proceso y cito: “…Es la hora de la serenidad, el discernimiento y el compromiso…Para que los cubanos dejemos de exigir a un Gobierno extranjero que le exija al nuestro lo que nosotros debemos exigirle. Y por otro lado, para que ningún gobierno, nunca más, considere como un derecho la injerencia en los asuntos internos de otro porque ha convertido el diferendo entre ellos en política doméstica….Dejemos de exigir a un Gobierno extranjero que le exija al nuestro lo que nosotros debemos exigirle.” (2) Cuando lo que se expresa es objetivo, constructivo y positivo, debemos estar de acuerdo en ello con independencia de quien lo exprese; pienso que la política de “Plaza Sitiada” que tanto he reiterado con insistencia en mis crónicas y artículos ha quedado cada vez más obsoleta y contraproducente; y que todos juntos debemos disponernos a edificar algo que también he planteado muchas veces: una República donde quepamos todos, efectivamente con todos y para el bien de todos, como la soñó Martí. Así lo pienso y así lo expreso, con mis respetos por el pensamiento diferente y sin querer ofender a nadie en particular. fsmederos@gmail.com (1) Ver en Por Esto! EN MIS 77, por la esperanza y el futuro…, publicado el lunes 3 de agosto del 2015 (2) http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=418891 (3) Revista Guanajay , contacto@guanjayweb.com Revista Ideal www.idealpress.com Publicado en el periódico Por Esto! de Mérida, Yucatán, México el domingo 23 de agosto del 2015 http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=423035

EXPLORANDO AMARGURA

Explorando Amargura Ciro Bianchi Ross • digital@juventudrebelde.cu 22 de Agosto del 2015 20:13:28 CDT Amargura es una calle que corre entre dos plazas, la del Cristo y la de San Francisco. O entre dos restaurantes, La Maravilla, famoso, en los años 50, por sus bistec con papas fritas, que ya no existe, y el Café del Oriente, establecimiento de tendencia gourmet que se precia de ser uno de los más lujosos de La Habana, y, bien lo sabe el escribidor, de los más caros también. Pero ninguno de ellos abre su fachada sobre Amargura. La Maravilla lo hace sobre Villegas, mientras que el otro mira hacia la calle Oficios. También mira hacia esa calle el Palacio del Marqués de San Felipe y Santiago de Bejucal, hoy un hotel con portada barroca, 27 habitaciones y categoría de cinco estrellas. Amargura no fue nunca meca del comercio ni de la moda. Tampoco era de las calles que la gente escogía para el paseo matinal o vespertino, ni el sitio ideal para ver y dejarse ver. No hubo en ella café ni bares dignos de memoria, y sus dos hoteles —Nueva Luz, en el 303 de la calle, y La Unión, en la esquina con Cuba— no pasaron de ser instalaciones de segunda y a la larga se descomercializaron: son hoy casas de vecindad. La Unión fue, en sus buenos tiempos, lo que se llamaba un hotel «decente». Un edificio sólido, de cinco plantas, en chaflán, con 150 habitaciones y 150 baños, donde el poeta español Federico García Lorca pasó, en 1930, la mayor parte de su estancia cubana. Amargura era otra cosa. Marcaba uno de los límites del distrito bancario habanero, nuestro pequeño Wall Street, que se extendía desde O’Reilly y abarcaba desde Mercaderes hasta Compostela. Bancos y bufetes Allí encontraban asiento la Cámara de Comercio de la República de Cuba —en el actual Hotel Raquel, en la esquina con San Ignacio— y la Compañía Cubana de Fianzas —en el 203 de la calle; edificio que sirve ahora de sede al Instituto de Antropología. En el número 53 se hallaba el Banco Continental Cubano, que contaba con 57 sucursales y 1 169 empleados en toda la República, en ese sentido la mayor de todas las entidades bancarias nacionales, y la quinta en cuanto al monto de sus depósitos que superaban los 92 millones de pesos equivalentes a dólares. La General Electric y la Esso Satndart Oil figuraban, entre otras empresas, como sus clientes principales. En la esquina con Cuba, y entrada principal por esta calle, se hallaba la Renta Nacional de Lotería, ahora oficina central del Bandec, y en la de Aguiar, el Banco Gelats, el más antiguo entre los cubanos —fue fundado en 1876—, la firma bancaria preferida por el capital español radicado en la Isla y que operaba las cuentas de la Iglesia Católica cubana y los intereses del Vaticano en Cuba, así como la cuenta en dólares del comercio entre Cuba y España. Gelats, que se ahorcó en su casa de 17 esquina a H, en el Vedado, en 1959, tenía también como clientes a la Compañía Cubana de Electricidad y a la Compañía Cubana de Teléfonos y era tenedor de bonos del Gobierno norteamericano. Amargura era una calle de firmas y oficinas de abogados. Un conteo apresurado y posiblemente inexacto, en el Directorio Telefónico de 1958, registra los nombres de 28 letrados asentados en esa calle; algunos de ellos tan conocidos como Carlos Márquez Sterling, presidente de la convención constituyente de 1940 y candidato a la presidencia de la República en las elecciones de noviembre de 1958, en el número 357, y Pelayo Cuervo Navarro, en un ya inencontrable número 8 de la calle. Pelayo fue detenido por agentes del Buró de Investigaciones de la Policía de Batista en la tarde del 13 de marzo de 1957, tras los sucesos del asalto al Palacio Presidencial y apareció golpeado y muerto a la mañana siguiente en el Laguito del Country Club habanero. No tuvo implicación alguna en ese hecho, ni era un elemento que pudiera tildarse de subversivo. Para él, la «solución cubana» pasaba por la política y no por la revolución. Era, sí, una figura querida y respetada y de una popularidad enorme. Delegado a la convención constituyente de 1940 y senador de la República desde entonces y hasta 1952 cuando Batista, tras el golpe de Estado del 10 de marzo, dejó en suspenso el Congreso. Como presidente del Partido Ortodoxo histórico, Pelayo Cuervo era la personalidad más distinguida de la oposición política cubana y una voz implacable en defensa de la economía nacional y el bolsillo del ciudadano de a pie. De los 28 abogados consignados, cinco tenían oficinas en el edificio marcado con el número 103 de la calle, en tanto que otros diez despachaban sus asuntos en el del número 205, sede del Bufete Mendoza, uno de los más importantes y el más antiguo especializado en asuntos mercantiles. Había sido fundado en 1854 y fue pionero en dirigir su práctica profesional hacia el mundo de los negocios. La Cruz Verde En su libro La Habana: Apuntes históricos, Emilio Roig no consigna el porqué del nombre de esta calle. Sí lo hace José María de la Torre en su libro Lo que fuimos y lo que somos o La Habana antigua y moderna, publicado en 1857. Escribe De la Torre que en todas las tardes de cuaresma salía de la Tercera Orden de San Francisco una procesión que iba por esa calle hasta la iglesia del Cristo, que era el Humilladero. Por la misma razón, se ven calles con igual nombre en muchas poblaciones cristianas, refiere el cronista, a imitación de la del vía crucis de Jerusalén, que se llamó de la Amargura. En la calle había cruces para cada estación. El hermano tercero D. Miguel de Castro Palomino y Borroto tenía particular devoción y costeaba la duodécima estación por los años de 1749, y la adornaba con una alfombra, dos candeleros de plata y un cuadro de Jesús Crucificado. Añade José María de la Torre que Amargura se llamó también calle de la Cruz Verde, por la que existía (y existe) en la esquina con Mercaderes. De ahí partía la procesión del vía crucis. Fue residencia de los condes de Lagunillas y da albergue hoy al Museo del Chocolate que propone un recorrido por la historia del cacao, su cultivo, producción y comercialización. Por otra parte, este establecimiento asegura a quien lo visite la posibilidad de degustar una bebida preparada a la manera tradicional y bombones elaborados artesanalmente. El tramo de Amargura comprendido entre las calles de Villegas y Compostela —dos cuadras— se llamó, afirma De la Torre, de las Piadosas Mujeres, porque en la casa de la esquina con Aguacate vivían las beatas Josefa y Petrona Urrutia que alumbraban los viernes un hermoso Custodio. La cruz que existía en esa esquina marcaba en el vía crucis la estación que correspondía a las piadosas mujeres que acompañaron a Cristo en su calvario. La esquina de Compostela se llamó Del Mallorquín, por Juan Pascual, un sujeto proveniente de Mallorca que instaló allí una botica, mientras que la esquina de la residencia de los condes de San Felipe y Santiago fue conocida como la de Menéndez, por el hombre que la fabricó. Allí murió en 1807 Joaquín de Santa Cruz y Cárdenas, tercer conde de Jaruco y primer conde de Mopox, padre de la condesa de Merlin. Fue, en su tiempo, el hombre más rico de la Isla. Pero era iluso y poco práctico. Soñaba con grandes empresas y casi todas fracasaron; pese a que carecía de escrúpulos, su capital decrecía y sus deudas aumentaban. Cuando falleció, legó a su hijo la inmensa fortuna —para la época— de nueve millones de pesos, condicionada por una deuda de siete millones que en el testamento le obligaba a honrar. Los Amigos del País En Amargura casi esquina a San Ignacio tuvo su casa don Francisco de Arango y Parreño, el llamado «estadista sin Estado», eminencia gris de la sacarocracia criolla. Fue el primero de nuestros economistas; promovió la introducción de una agricultura moderna y auspició asimismo la constitución de la Junta de Comercio y el Tribunal Mercantil. Director de la Sociedad Patriótica. Diputado a Cortes. Como Consejero de Indias, en 1816 logró el desestanco del tabaco y la libertad de comercio. Gracias a su gestión, esa maravilla que es el hielo fue introducido en Cuba. En 1824 rechazó el nombramiento de superintendente general de Hacienda y a partir de ahí pasó sus años finales alejado de la vida pública. Falleció en 1837. La casa de este esclarecido habanero, convenientemente restaurada, la ocupa desde hace poco tiempo la Oficina del Historiador de la Ciudad. En el número 66 de la calle radicó la sede de la Sociedad Económica de Amigos del País, y en ese mismo sitio y durante una primera etapa y antes de trasladarse a la Manzana de Gómez, funcionó la Institución Hispanocubana de Cultura. Fue una propuesta de Fernando Ortiz en la junta de gobierno de los Amigos del País encaminada a incrementar las relaciones intelectuales entre Cuba, España y las naciones hispanoamericanas gracias al intercambio de científicos, escritores, artistas y estudiantes. En el número 63, domicilio de Evaristo Estenoz, —un inmueble que ya no existe— se fundó el 7 de agosto de 1908, el Partido Independiente de Color. Otro hecho no puede quedar fuera de este recuento. Desde el cuartelillo de los Bomberos del Comercio, sito en la calle San Ignacio, hicieron una llamada telefónica al segundo jefe de ese cuerpo que residía en la casa marcada hoy con el número 110 A de la calle Amargura. Es la primera llamada telefónica en español que se registra en la historia. También en la calle Amargura vivía la protagonista de un suceso de sangre ocurrido en 1745, cuando La Habana era chiquita. Lo recoge la crónica habanera y quizá sea el hecho de sangre más antiguo que involucre a una mujer. Una vecina principal de la villa, María de Rojas, descendiente de Rojas el Magnífico, que acompañó a Velásquez en la colonización y fue, por tanto, uno de los primeros vecinos de La Habana, llevaba relaciones, sobre la base del matrimonio, con el capitán Diego de Hinojosa, del regimiento de Almanza. De María, al capitán solo le interesaban el dinero y la posición. Tenía la muchacha muy poco que agradecer a la naturaleza, y a su fealdad se añadía el carácter: era ácida, explosiva, violenta y, para colmo, celosa. No tenía día bueno ni noche tranquila desde que empezó su noviazgo. Imaginaba continuamente a su novio en brazos de otra. En eso, en verdad, no andaba desencaminaba la Rojas. Había en la vida del capitán otra mujer, linda y alegre como la primavera. Tenía 20 años de edad y aunque mucho había sonado ya los cascabeles no ocultaba su pasión por don Diego. Se llamaba Cándida, si bien no conocía la candidez. No tardó en llegar a oídos de María el trapicheo de su prometido. Conoció a la que le robaba a su galán, y, en una escena borrascosa, echó en cara al capitán su perfidia. Don Diego lo tiró todo a broma, sin saber que no hay broma que valga con una mujer celosa. Una mañana, a la salida de la iglesia de San Agustín, la Rojas esperaba a Cándida con un revólver cargado de sal y apuntó al rostro de la muchacha. El transcurrir de los días aplacó el escándalo antes de que las dos mujeres volvieran a encontrarse otra vez frente a la iglesia. Cándida le dio entonces las gracias por los lunares que la pólvora del pistoletazo dejó en su rostro. «Dice don Diego que ahora luzco más linda que antes», le dijo y la machacó: «Entre al templo y pida que don Diego la quiera; pídaselo a Santa Rita, es la abogada de los imposibles…» Cándida volvió la espalda para entrar a la iglesia, pero no pudo hacerlo. Sonó un disparo y cayó muerta en el acto. Esa vez la Rojas le había disparado con balas de verdad. Enviar por E -- Ciro Bianchi Ross cbianchi@enet.cu http://wwwcirobianchi.blogia.com/ http://cbianchiross.blogia.com/

lunes, 17 de agosto de 2015

ASUNTO RICARDO SÁNCHEZ, RESPUESTA A INTERROGANTES RESPETUOSAS E INSOLENTES

ELIGIO DAMAS Mi artículo anterior, relativo a la incorporación de Ricardo Sánchez y su grupo al Polo Patriótico, lo que significó además su postulación en las planchas del mismo universo, no sólo fue bastante leído o, por lo menos abierto una muy buena cantidad de veces, sino que generó una significativa cantidad de correos y tuíteres dirigidos al suscrito. En unos, como el que comentaré en este espacio, se me trató con respeto y decencia, como para que me motivase a responderle, sobre todo para hacer algunas precisiones. Pues resulta que uno cree poner énfasis en un asunto y, pareciera equivocarse, pues el lector creyó encontrar lo sustancial en otro, de donde nos hace suponer que no fuimos lo suficientemente claros en el planteamiento y dimos origen a interpretaciones que no eran el centro o la meta que perseguíamos. Ante tal situación, por la experiencia, por no decir la edad y la condición de docente, nos sentimos obligamos a presumir que algo hicimos mal y se hace necesario hacer precisiones que creímos entonces innecesarias. Como ya dije, me referiré a uno en particular porque el respeto y la delicadeza con que fui tratado, me obligan. También por aquellos, especialmente una persona que se leerá esto, cuyos comentarios se limitaron a interrogaciones como llenas de asombro. Por último, a quienes me expresaron solidaridad y comprensión, no escatimaré mis agradecimientos. Un lector, cuyo nombre omitiré, pues no me ha autorizado a mencionarlo, me hizo el siguiente comentario, que transcribo fielmente: “Hola Eligio, me dirijo a usted con respeto, leí su artículo, y no estoy de acuerdo, y le presento mis razones”. “Estudié con Ricardo Sánchez, a igual que Rosa Virginia Chávez, Estudios Internacionales, UCV, año 2002-2006, tampoco creo que Rosa Virginia esté de acuerdo con quien una vez adversó de la forma más vil y directa a su padre, hoy sea nuestro candidato”. “Usted a lo mejor no lo sabe, pero Ricardo se encargó de hacernos la vida a cuadritos a cualquier chavista de la escuela, incluso le decíamos bromeando Ricardo Arocha, debido a que era el predilecto de Cecilia Arocha y Antonio Paris, a lo mejor no recuerda las manitos blancas, yo sí, porque me tocó vivirlo.” “Por otro lado, no se crea que Ricardo amaneció un día con el espíritu de la revolución, jamás lo ha sido, y jamás lo será, así nos lo demostró a todos quienes estudiamos con él, ahhh que tiene ciertos intereses que le permiten adaptarse a estas circunstancias, es otra cosa muy distinta. Así que no creo “quiere pegar su hombro al nuestro”, lo que quiere es pegar sus propios intereses”. La frase que aparece subrayada es una cita textual que quien me escribe hace de mi artículo. Luego continúa: “Ricardo llamó a Chávez como el gobierno más corrupto de la historia de Venezuela, y hasta dudó de la enfermedad de Chávez”. Al final me entero que quien eso escribió, con mucho respeto hacia mí, como han podido comprobar es profesor de Universidad Bolivariana de Venezuela. Habiéndolo leído y reconfortado tras los insultos y agravios, donde el calificativo indigno fue una de los tantos calificativos utilizados en lugar de argumentos políticos e históricos, procedí a responder de la siguiente forma, sin dejar de advertir que con posterioridad hice unos agregados en virtud que el texto inicial lo redacté bajo presión por la presencia de una visita en mi residencia que demandaba le atendiese. Te respondo por tu bello y respetuoso gesto. No he afirmado que esté de acuerdo con esa candidatura; sólo dije: No estoy seguro si Ricardo Sánchez deba estar en las planchas del Psuv. Aunque según lo que he visto, tampoco es muy generosa la posición en la que le inscribirán. Y agregué: Parece demasiado inmaduro, no por la juventud de quien lo sostenga, decir que Sánchez no debería ser candidato por su pasado”. He objetado, en primer término, que se use como argumento para protestar contra Sánchez, su pasado político y lo que es peor, se le niegue a un joven, sobre todo eso, a un joven, la posibilidad de resarcirse y participar en nuestras luchas por lo que fue antes. Sostengo, porque el hecho que le hayan incluido en planchas no es de mi responsabilidad y hasta porque bien pudiera manifestarme en desacuerdo; pero no tengo duda que a él, como a muchos jóvenes que de allá quieran venirse para acá, hay que recibirlos con respeto y cordialidad. Se trata que estamos obligados a sumar y por supuesto, darle oportunidad de incorporarse a nuestras luchas a todo aquel joven o no que lo desee, sin ser demasiado rencoroso con su pasado y sin dejar de observarles. Es esto lo que defiendo, el derecho de cualquier joven a redefinirse, cambiar de conformidad los dictados de su conciencia sin comportarnos como tribunal eclesiástico de la edad media o los perseguidores de “Las brujas de Salem”. Respeto el derecho de todos a manifestar su inconformidad por la designación de Sánchez y cualquier otro como candidato a diputado, sobre todo si están del lado por el cual se inclinará nuestro voto, pero también protesto contra quien descalifique a cualquiera que manifieste su deseo de acompañarnos en nuestras luchas fundamentándose en conductas pasadas y los supuestos acerca de “oscuros planes”, “fines inconfesables”, sin ningún sustento objetivo. Te contaré unas de las tantas historias que conozco. El suscrito fue secretario juvenil de AD en el Estado Sucre hasta 1960, cuando fundamos el MIR. ¿Sabías que Jorge Rodríguez, padre, quien fue mi compañero y amigo, puedes preguntarle al gordo Antonio Aldazoro, su también amigo y paisano larense, en su juventud estuvo muy cerca de Carlos Andrés Pérez? Carmelo Laborit, el gran Carmelo, el maestro de muchos de nosotros, también vino de AD. El comandante Fernando Soto Rojas, él lo recuerda frecuentemente, fue dirigente juvenil del mismo partido. Salom Meza Espinoza, si no sabes quién es, averigua, siendo adeco, a nosotros los de la izquierda, que estábamos unos en la lucha armada y en general en la clandestinidad, presos o escondiéndonos, nos agredió sistemáticamente, mucho más que lo que pudo haber hecho Ricardo Sánchez. Tanto que me apena decir algunas cosas por respeto a su memoria de combatiente revolucionario que es lo que quiero recordar y preservar. Una vez le pregunté a mi amigo, hermano y compañero Moisés Moleiro, por qué aquel hombre nos agredía tanto y recibí como respuesta, de un político generoso y lúcido, lo siguiente: “El cree que eso que dice es verdad. Es lo que le informan. Da por seguro que, cuando se convenza de lo contrario lo dirá y se vendrá con nosotros”. Así fue. Salom Meza fue de los primeros que acompañó al Dr. Prieto a fundar el MEP. Además, le recibimos con camaradería, sin pasarle factura y los últimos años de su vida los puso al servicio de la causa por la cual luchamos. Es un personaje a quien debemos respeto y reconocimiento por sus luchas a favor de una Venezuela mejor y contra el imperialismo. No dudo lo que dices sobre el pasado de Sánchez y tal como lo dices. Lo sé. Conozco los hechos, incluso los de las “manitas blancas” que fueron de ayer mismo. Pero los años me permiten aconsejarte no te cierres a la posibilidad que ese joven esté cambiando. Tú y menos yo, no estamos en capacidad de predecir lo que hará. Es posible que tus dudas no sólo tengan fundamento sino que se confirmen. Pero también es posible y hasta necesario, tu eres lo suficiente talentoso, lo sé, para entenderlo, admitir que puedes equivocarte. Por los momentos, lo único que podemos hacer es, sin dejar de protestar con respeto que se le ponga en planchas por las que tendríamos que votar o las nuestras en cualquier circuito, porque en caso contrario no tiene sentido, tenderle la mano, observarle y hasta ayudarle. Por supuesto, el equivocado podría ser yo, no sería esa la primera vez y espero no sea la última. Te repito, si me relees verás que no defiendo su candidatura, por lo menos no fue esa mi intención, como tampoco defiendo muchas de los electos dentro de Psuv, por el respaldo del aparato del Estado y otras escogidas a dedo, sin la necesaria y rigurosa evaluación desde la perspectiva de la lucha que habrá de darse. Lo que defiendo es la conducta sensata de brindarle la oportunidad a un ser humano y, sobre todo joven, a rehacer su vida política, incorporarse a una causa justa, la lucha que damos. Pero ella no es nuestra, es de todos los venezolanos que sienten la patria y la necesidad de construir una sociedad justa y equilibrada. No formamos parte de una secta. Tal oportunidad nos la merecemos todos. He dejado para el final hacer mención a Pedro Camejo, Negro Primero”. Pese el espaldarazo dado por Eduardo Blanco al héroe, en la obra romántica “Venezuela Heroica”, donde se narra lo relativo a los últimos momentos de su vida y aquello de “vengo a decirle adiós porque estoy muerto”, dicho a su general José Antonio Páez, a modo de despedida, hasta hace poco no había entrado al panteón nacional, donde se hallan unos cuantos que no deberían estar. Unos dicen que no había llegado, como José Leonardo Chirinos, por negro y otros, porque le tenían guardada la factura de su pasado, de cuando formó parte de las fuerzas de José Tomás Boves. Las menciones que he hecho bajo ninguna circunstancia deben servir para que la mala fe les utilice para hacer irónicas y odiosas comparaciones entre los personajes, sino entre los hechos y las circunstancias. -- Publicado por Eligio Damas para BLOG DE ELIGIO DAMAS el 8/06/2015 01:52:00 p. m.

AVANCE SOCIO-ECONOMICO EN ECUADOR (PESE A LA AGRESIVIDAD DE LA DERECHA)

Epígrafe: Pese a la agresividad de la derecha Título: Avances socio-económicos en Ecuador Por Hedelberto López Blanch Son muchos y abundantes los logros económicos y sociales alcanzados por el gobierno del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, desde su llegada al poder en 2007. Han sido ocho años de beneficios totales para la mayoría de la población. Además se logró la estabilidad política de la nación que había sufrido a inicios de la década del 2000 la expulsión de tres gobiernos pro occidentales que conllevaron enormes desastres económicos, al ser aplicadas extremas políticas neoliberales orientadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM). En ese corto período de tiempo se lograron mayores adelantos que en los 50 años anteriores de seudo república. Pero como todos los gobiernos nacionalistas y progresistas que han surgido en los últimos 16 años en América Latina, desde el triunfo de la Revolución Bolivariana de Hugo Chávez en 1999, ahora la administración del presidente ecuatoriano Rafael Correa, también enfrenta los embates de una derecha agresiva, cuya dirección principal proviene de Washington. Con ese objetivo la oligarquía criolla, que controla con su capital los medios de comunicación, logró convencer a varias organizaciones para realizar un paro nacional cuyo objetivo era la desestabilización nacional y el derrocamiento del gobierno. No es la primera ocasión que esas acciones sucedían pues recordemos que el 30 de septiembre de 2010 tuvo lugar una cruenta intentona golpista donde por primera vez en la historia de la nación andina, el gobierno enfrentó la insubordinación de las fuerzas armadas y salió victorioso. Los antecedentes de estas acciones tienen su explicación con la llegada al poder de Correa en enero de 2007 y la puesta en marcha de la Revolución Ciudadana que acabó con la inestabilidad política, las políticas neoliberales antes aplicadas y la fuerte injerencia extranjera que existía. No ha sido por complacencia que la Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), Alicia Bárcena, haya reconocido los logros obtenidos por Ecuador en la disminución de la pobreza, que en la década de 1990 llegaba al 60 % y en la actualidad se cifra en 22 % debido a las políticas económicas del programa denominado Buen Vivir. La CEPAL destacó el constante crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) (alrededor 5 % promedio anual) y los aportes del 25 % a la inversión pública, así como enfatizó los esfuerzos para combatir la desigualdad y reducir los índices de pobreza mediante una política económica dinámica desde los estratos más bajos. Cifras oficiales señalan que por primera vez, las familias ecuatorianas pueden cubrir un 93 % de la canasta básica con sus ingresos, mientras que antes de 2007 solo llegaba al 50 % de cobertura. En ese aspecto un índice clave resulta la tasa de desempleo que en 2014 se ubicó en 4,5 %, una de las más bajas del continente; una reducción de la pobreza de siete puntos porcentuales y un crecimiento en el sector no petrolero en un 9,5 %. Correa desde principios de su mandato fue directo a eliminar los graves problemas que afectaban a la nación: expropió a banqueros los bienes mal habidos; forzó a las petroleras transnacionales a cambiar sus contratos en beneficio del pueblo; suspendió el pago de la deuda externa por considerarla ilegítima y les propuso a los acreedores la recompra con un descuento de 70 %. Ecuador ha sido uno de los países que más ha reducido la desigualdad en América Latina pues del 2007 al 2014 bajo su coeficiente Gini (que mide en general la desigualdad existente en las poblaciones) de 0,55 a 0,48. La diferencia entre el 10 % más rico en relación al 10 % más pobre, disminuyó de 42 a 22 lo que acorta el abismo monetario entre los poderosos y los menos afortunados. Durante la Revolución Ciudadana se han aprobado 180 leyes para transformar las relaciones de poder e impulsar garantías sociales a todos los ciudadanos. El total de matrículas en el sistema público creció en estos ocho años de 2 604 000 a 3 479 000, mientras se invirtieron más de 1 000 millones de dólares en nuevas universidades y la cantidad de becas gratuitas alcanzan a 10 482 estudiantes cuando en el período de 1994 a 2006 solo se entregaron a 237 alumnos. Las inversiones en salud han sobrepasado los 12 000 millones de dólares y cerca de 20 000 galenos se han integrado al sistema público (una cuarta parte formados en la Escuela Latinoamericana de Medicina cubana). Además, regresaron al país 1 200 profesionales de la salud que habían emigrado por la crisis neoliberal de las décadas de 1990 y principios del 2000. La atención médico sanitaria se ha extendido a los lugares más recónditos de su geografía, lo cual ocurre por primera vez en la historia de ese país. Las consultas en los hospitales públicos alcanzaron en 2014 los 43 870 180, o sea, 27 000 000 más que en 2006. La Organización Mundial de la Salud ha destacado, entre otros aspectos relevantes, que la desnutrición en el país se ha reducido de 1,1 % al 0,4 % en estos años. Y no solo Correa se ha destacado por la gestión realizada en el desarrollo nacional sino que ha ido mucho más allá con su visión integradora latinoamericanista. En enero pasado, al recibir la presidencia pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) llamó a “impulsar con Voluntad Política los Grandes Proyectos de Infraestructura que garanticen nuestra integración, nuestra conectividad. La organización debe disponer de una Planificación Regional que aterrice, concrete los Megaproyectos Viales, Energéticos, y de Telecomunicaciones, para potenciar nuestra complementariedad”. Entre otros importantes asuntos destacó que “La CELAC debe jugar un Rol protagónico en acompañar el Proceso de Descolonización en la Región Latinoamericana y Caribeña… debe ser el actor de referencia en la resolución de conflictos, o herencias de larga data que atañen a los países de la Región”. Los logros de Ecuador y las valientes posiciones integracionistas latinoamericanas del presidente Correa no son nada agradables para los oligarcas nacionales y extranjeros que aun sueñan con que América Latina continúe siendo el traspatio de Estados Unidos. Pero los pueblos ya han despertado de ese largo letargo.

LOS LECTORES ESCRIBEN

Los lectores escriben Ciro Bianchi Ross • digital@juventudrebelde.cu 15 de Agosto del 2015 19:35:46 CDT El lector Rolando Estévez y una lectora que firma Cristi su mensaje electrónico y que debe moverse en la esfera de la cinematografía, escriben a fin de llamar la atención sobre el error que advirtieron en la página de la semana pasada, aparecida con el título Del Fructuoso me han dado un recado, y que se dedicó al prestigioso Hospital Ortopédico Fructuoso Rodríguez en ocasión del aniversario 70 de su apertura. Lo que el lector Estévez califica como «desliz», el escribidor lo define como un solemne y soberano disparate, y acepta totalmente su responsabilidad. No contrastó suficientemente sus fuentes y, al aludir al sustituto del doctor Martínez Páez en la dirección de esa casa de salud, escribió que «el Dr. Blardoni ha sabido mantener hasta la actualidad la tradición docente-asistencial del Fructuoso…». Ello resulta imposible porque el distinguido profesor enfermó de cuidado a fines de 2008 y falleció a mediados del año siguiente. La dirección pasó entonces a otras manos. Comenta el profesor Diego Artiles, especialista en Ortopedia de esa institución, que la carga asistencial del hospital perjudicó equipos y deterioró la edificación, lo que obligó al cierre por períodos de la unidad quirúrgica. Pese a eso se continuó trabajando arduamente en las esferas docente-asistenciales e investigativas. Un logro de relieve fueron las 614 intervenciones de fractura de cadera que durante el año pasado se realizaron allí en un solo quirófano del Cuerpo de Guardia, cifra que constituye el 34 por ciento de ese tipo de fracturas operadas en La Habana y el 9,3 por ciento de las intervenidas en todo el país. Precisa el doctor Artiles que con motivo de los 70 años del hospital, se inauguró la unidad quirúrgica y una sala de hospitalización para cirugía de alta complejidad. Desde Puerto Rico En relación con la página de hace dos semanas, remite, desde San Juan de Puerto Rico, dos mensajes electrónicos el lector Gerardo Barrera. Dice el primero de ellos: «Con el tema de la poliomielitis, trajiste a mi memoria la primera mitad de los años 50 en La Habana, cuando todos vivíamos aterrados con ese maldito virus que, gracias a Dios, no atacó a nadie en mi familia. Con el pasar de los años, conocí a varias personas que sufrían las secuelas de esa enfermedad. «El doctor Ricardo Machín, que mencionas en tu artículo de hoy, era primo hermano de mi padre, pero como ninguno de los dos tuvo hermanos varones, ellos se consideraban hermanos entre sí. «Ricardo Machín era como un misionero de la Medicina. Atendía en su consultorio a decenas de personas sin recursos, a los que no les cobraba un centavo. Por cierto, él y mi padre fueron arrestados en el aeropuerto de Miami en los años de la Segunda Guerra Mundial cuando iban a comprar repuestos para una lancha, porque tío Ricardo era representante de unos productos médicos de los laboratorios alemanes Merck, A.G., los cuales no se recibían en Cuba desde poco antes de comenzar el conflicto. «Tío Ricardo era el padre de “Tavo” Machín, que murió en Bolivia junto al Che. «Ahora, como ya es habitual, voy a enviar tu interesante artículo a unos 50 amigos y conocidos que todas las semanas lo disfrutan». En la página de la semana antepasada, el escribidor aludía a los hermanos Alberto y Clemente Inclán Costa, ortopédico el primero, y pediatra el segundo, además de rector de la Universidad de La Habana. En su segundo mensaje, el lector Barrera da cuenta de lo que en relación con estos eminentes profesionales de la Salud, le dice el doctor Enrique Lamoutte Inclán, magistrado del Tribunal de Quiebras, de Puerto Rico: «Los doctores Inclán Costa eran primos de mi abuelo Serafín Inclán Arango. Asturianos. Mi abuelo decía que los Inclán profesionales fueron a Cuba y los agricultores a Puerto Rico. Mami recuerda cuando la artista Marion Inclán, hija de uno de ellos, se quedó con la familia en Puerto Rico. Siempre aclaraba que los Inclán de México no eran familia». El flagelo de la polio Y ya que se mencionó ese terrible flagelo, que se eliminó en Cuba después de 1959, voy a reproducir algunos datos sobre su incidencia en la Isla, encontrados en viejos papeles. Se dice que hizo su aparición en Cuba en 1908. Tres casos se diagnosticaron entonces. Al año siguiente, 135 enfermos se registraban en Santa Clara y pueblos vecinos. A partir de ahí, con intervalos, ocurrieron brotes epidémicos de importancia, como el de junio-diciembre de 1935, que registró más de 500 víctimas. Con un número más o menos similar cerraría la epidemia de 1946. La casa de Marina Sobre la casa de Marina inquiere un lector cuyo nombre no recogí. Marina Cuenya fue la más famosa matrona en La Habana anterior a 1959. Era de origen gallego y tenía dos hijos. Un varón y una hembra que vivía en la Argentina y a la que hacía envíos periódicos de dinero. Hubo muchos prostíbulos en La Habana anterior a 1959. El único que pasó a la crónica es el de Marina, en la calle Colón número 258, en el muy habanero barrio del mismo nombre, una de las zonas de tolerancia de la capital cubana en la época. Marina no tuvo nunca casas en Infanta ni en la calle Marina. Lo que sucede es que con su nombre se ha bautizado a más de una propietaria de burdeles. Era, por sus tarifas y las personalidades que lo frecuentaban, un sitio bastante exclusivo. El «servicio» se prestaba por diez pesos —una fortuna en la década de 1940—, y la puerta principal se abría solo al cliente conocido y, a discreción, al que llegaba recomendado o podía mencionar, por su nombre, a alguna de las muchachas que «laboraba» en la casa. La saleta, donde se exhibía una imagen de bulto enorme de Santa Bárbara, con su corona y su espada de oro, daba paso al patio central rematado por un bar bien surtido. Allí muchachas bien vestidas y perfumadas esperaban por el cliente para perderse en el piso de arriba. Un álbum recogía las fotos de todas las «pupilas» de Marina, lo que permitía al cliente ahorrar tiempo a la hora de escoger y hacer su selección a distancia. Esa manera de ofrecer a las prostitutas fue toda una novedad en La Habana de su tiempo. El álbum, se dice, todavía anda por ahí. La imagen de Santa Bárbara permanece en la saleta de lo que fue el prostíbulo, ya sin su corona ni su espada de oro. Un día, el general Quirino Uría, jefe de la Policía Nacional, y Lomberto Díaz, ministro de Gobernación (Interior), salieron del periódico El Mundo, en Virtudes 257 esquina a Águila. Se dirigirían al Palacio Presidencial y decidieron hacer el trayecto a pie. Atravesaron el barrio de Colón y llegaron escandalizados a la mansión del Ejecutivo. El Ministro sugirió al presidente Prío que tomara alguna medida con la zona de tolerancia, y Prío le respondió que hiciera lo que estimara oportuno. De aquella conversación salió el famoso decreto que clausuraba el barrio de Colón y que inspiró al compositor Eliseo Grenet aquel sabroso sucu-sucu que decía: «Ya los majases no tienen cueva / Felipe Blanco se la tapó…». Días más tarde, ya con las putas desalojadas y los prostíbulos cerrados, el doctor Héctor Garcini, un distinguido abogado con bufete en La Habana, visitó al Ministro de Gobernación en su despacho oficial del viejo colegio de Belén. Iba a abogar por el barrio. Lomberto Díaz le comentó que los dueños de los inmuebles que albergaban los prostíbulos debían sentirse contentos del desalojo, pues podrían así reivindicar Colón y alquilar a familias los locales. Garcini movió la cabeza en sentido de negación. La cosa no era tan fácil. Una familia pagaría por aquellas casas entre 25 y 40 pesos como máximo, mientras que la misma casa dispuesta para prostíbulo rentaba no menos de trescientos pesos mensuales. Añadió el abogado: «Imagine usted el disgusto de los propietarios». Preguntó entonces el Ministro a quiénes se refería, y la respuesta llegó rápida. —Aparte de unos pocos inmuebles que pertenecen a una o a otra persona, el barrio tiene un solo propietario —dijo el abogado y se acercó al oído del Ministro, para pronunciar su nombre y que el escribidor, aunque lo sabe, no va a repetir por ahora. Con el barrio clausurado, Marina, con sus muchachas, se instaló en la casa de las cúpulas que se halla a la salida del puente Almendares, a la izquierda, según se va del Vedado hacia Playa. De ahí la desalojaron las señoras del reparto Kohly, encabezadas por la esposa del abogado Dorta Duque, profesor de la Universidad Católica de Santo Tomás de Villanueva. Fue entonces que fabricó el Mambo Club, en el kilómetro tres de la carretera de Rancho Boyeros, un centro nocturno con prostíbulo incluido. Con el tiempo, Colón volvió a abrir como zona de tolerancia. Marina conservaba su casa, pues nunca la abandonó del todo; había dejado en ella a un par de sirvientas con el encargo de cuidar y mantener la propiedad. Triunfó la Revolución; cambiaron los patrones sociales y el barrio entró en un declive indetenible, hasta que lo cerraron de verdad. Marina entonces encargó a su marido, mucho más joven que ella, que sacara de la casa la corona y la espada de oro de la imagen de Santa Bárbara, y otros objetos de valor. Salió de Cuba y se le perdió el rastro. ¿Lo sabe usted? El doctor Alex Muñoz Alvarado, investigador del Centro de Lingüística Aplicada, de Santiago de Cuba, acude al escribidor en busca de ayuda. Investiga sobre el nombre de algunas instituciones y le urge saber si el nombre oficial de la principal heladería de La Habana es Coppelia y si ese nombre está ligado al del ballet homónimo. Escribe que en Santiago la heladería principal mostraba una bailarina de ballet clásico en el letrero de la entrada, por lo que la gente alude a la instalación llamándola Coppelia, cuando su nombre oficial es La Arboleda. Inquiere, por último, si la heladería de la capital mostraba una imagen similar a la de Santiago o algo que la relacionara con el ballet Coppelia. ¿De no ser así, expresa, con qué tiene que ver ese nombre? Si alguien tiene respuestas para estas interrogantes, favor de comunicarse con este columnista. -- Ciro Bianchi Ross cbianchi@enet.cu http://wwwcirobianchi.blogia.com/ http://cbianchiross.blogia.com/ Estimado amigo Ciro: En relacion a tu articulo sobre la Casa de Marina, comento: Dos notorios proxenetas que en aquella epoca operaban en el Barrio de Colon, Hector Duarte Hernandez y Dario Lopez Sierra, se disputaban a tiro limpio el favor y "proteccion" del "propietario" de los prostibulos enmarcados en el mencionado barrio, donde por cierto, vivio Jose Lezama Lima. Dario recogia el alquiler de los prostibulos y el joven Hector Duarte intento desplazarlo. En mas de una ocasion se enfrentaron a tiros y resultaron heridos de gravedad. El Dr. Hector Garcini Guerra fue un destacado jurista e intelectual de altos vuelos, amigo de Juan Marinelo, Carlos Rafael Rodriguez y Osvaldo Dorticos Torrado. Fue uno de los jovenes oficiales que a finales de 1933 combatieron en el Hotel Nacional de Cuba. Durante mas de dos decadas ostento la catedra de Derecho Administrativo en la Universidad de la Habana. Fue mi profesor. Un abrazo. Pablo LLabre Raurell.

ENVIADO DE LA OEA CREE QUE EL PRESIDENTE EN HONDURAS ES VICTIMA DE FALTA DE CREDIBILIDAD

Maritza Rivera Corresponsal de APIC en Honduras Enviado de la OEA cree que el presidente es victima de falta de credibilidad. El facilitador de la OEA . para el dialogo nacional contra la corrupción y la impunidad en Honduras Jahn Biehl del Rio , dijo hoy que el presidente Juan Orlando Hernández es victima de la falta de credibilidad en el gobierno y que falta mucho , por hacer para generar confianza Hernández tiene excelente disposición para combatir la corrupción y la impunidad en Honduras , subrayó el enviado de la organización de estados americanos OEA a periodista antes de viajar a Washington . Destaco que el gobernante es victima también de esta falta absoluta de credibilidad en la que se encuentra inmerso el gobierno hondureño , el diplomado regresara a Tegucigalpa la próxima semana ,para cuando prevé convocar al dialogo a representantes de los partidos políticos Biehl del Rio enfatizo que hasta ahora no tiene ningún razón para dudar de la honestidad del Presidente hondureño . ya que el gobierno ha hablado con mucha franqueza . No obstante reconoció que en Honduras falta mucho por hacer para que se crea una minima confianza que permita obtener resultados pronto y efectivos en el combate a la corrupción y a la impunidad. En Honduras se nota una especie de cansancio mucho mas de las personas que conversemos hay una especie desgano frente a esta casi noticia continua de gente que aparece súbitamente con grandes cantidades de dinero señalo el diplomático añadió que como invitado al dialogo no puede no creo en la justicia popular juzgar a nadie , pero que considera que muchas de estas noticias ,, pueden ser muy injustas No creo en la justicia popular como no creo en la no justicia pero la justicia popular es peor que la no injusta señalo el facilitador OEA exhorto a los hondureños a resolver los problemas del país atreves del dialogo y por la vía pacifica ya que es la herramienta mas poderosa . BIEHL DEL RIO lamento el incidente ocurrido este viernes por la noche en la que un soldado resulto herido con una pedrada cuando manifestantes del movimiento oposición indignados intentaban llegar a la residencia privada de Hernández en Tegucigalpa .

jueves, 13 de agosto de 2015

ESTAN EQUIVOCADOS , SI NO COMIENZAN POR EL PUEBLO

ATENCIÓN FRANK ESTÁN EQUIVOCADOS, SI NO COMIENZAN POR EL PUEBLO…, http://www.poresto.net/imagenes/logofoto.png CRÓNICAS CUBANAS, Félix Sautié Mederos, Considero que el hastío y la desesperanza no podrán abandonarnos en la medida que el tiempo vaya avanzando con un más de lo mismo, que algunos se encargan de tratar de mantenerlo vivo a toda costa; y que repiten con dogmática reiteración, haciendo las mismas cosas de siempre y planteando públicamente en sus vueltas y vueltas por una realidad que no cambia, las mismas expresiones grises cuajadas de palabras mágicas con las que pretenden que la producción aumente, que los servicios sean más eficientes, que se cree lo que ellos denominan sentido de pertenencia y que aumenten los niveles de disciplina social. ¡Pobre Carlos Marx!, no podrá tener tranquilidad en su tumba; si eso que dicen y hacen es aplicación del marxismo en la acción social y en la gobernabilidad cotidiana. Así no habrá soluciones verdaderas en medio de los procesos que se han denominado de Actualización del Sistema, dentro de la cual estoy de acuerdo en que se han ido efectuando cambios, y reformas aunque muy insuficientes todavía en mi criterio, junto con la eliminación de algunas prohibiciones absurdas; no todas porque son muchas aún las que continúan vigentes, principalmente las que se derivan de la política de “Plaza Sitiada” que ve enemigos por todas partes y que se plantea un concepto autoritario, represivo y excluyente de la gobernabilidad. En estas circunstancias que trato de describir, los burócratas de la administración, la economía y la política se dan por satisfechos y cantan victoria con un nuevo triunfalismo que dicen que no es triunfalismo; y, que no puedo saber en realidad entonces ¿Qué es lo que realmente es?...; cuando afirman que todo va avanzando y que los niveles de cumplimiento alcanzan dígitos manifestados con números mágicos y abstractos derivados de la macro economía e incuso de lo que pudiera considerarse como la macro política, que en definitiva no se fundamentan en la realidad dura y cruda que atraviesa actualmente el pueblo de a pie. Comprendo que mis párrafos anteriores son algo complejos, con muchos empalmes y continuación reiterada de múltiples situaciones que se encadenan dentro de un mismo tiempo, en una misma sociedad; por lo que no puedo expresarlas con una mayor simplificación, porque me resultaría entonces muy difícil de comprender lo que está sucediendo a partir de lo que se nos quiere explicar de que se trabaja por un futuro mejor. En este orden de cosas, entiendo que si no somos capaces de ver de conjunto el escenario en movimiento que se está manifestando y sobre todo compararlo con la versión edulcorada que se publicita por los medios masivos oficiales; además de que también cuando comparamos esa versión que nos quieren imponer de conjunto, con los sentimientos y anhelos que animan a la población que nos rodea, podríamos comprender mejor la realidad en que vivimos insertados y rechazar sus versiones edulcoradas. En mi caso muy especial, cuando hablo del pueblo que nos rodea, me refiero a mis vecinos de Centro Habana donde convivimos, y es lo que vemos todos los días, con las ruinas, los derrumbes, las basuras en las calles y las aguas negras corriendo junto a los contenes de las aceras, mientras que los inspectores de Salud Pública quieren controlarnos el interior de nuestras casas que seguro están más limpias que las calles y espacios públicos, incluyendo al policlínico del barrio. Entonces con estas realidades verdaderas y no digo ninguna redundancia, no podremos entender nada de lo que se nos informa, de lo que se plantea en los discursos y de lo que se expresa con las frases manidas y acostumbradas con que algunos conducen su actividad diaria de control y chequeo, según lo que se publica en la prensa local. En estas circunstancias actuales, quiero decir que estoy de acuerdo con que se restablezcan las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, con que nos visite el Secretario de Estado e incluso el mismísimo Presidente Obama; y muy especialmente con que se reciba con grandes manifestaciones de aprecio y de honores al Papa Francisco que bien se los merece en mi muy modesta opinión, porque para mí y uso una expresión muy popular para calificarlo: es un Papa fuera de serie, verdadero seguidor de Jesús de Nazaret. Todo eso es muy positivo e importante para Cuba, pero si no se erradica el autoritarismo, las exclusiones, los repudios y las condenas represivas de quienes piensen distinto, a los que se les desconsidera y se les trata como si fueran los enemigos representantes del mismísimo Lucifer, no habrá soluciones verdaderas; y todo continuará empeorando, en un declive rumbo al abismo que algunos no quieren ver ni reconocer. Pienso que en realidad para donde verdaderamente hay que mirar ante todo lo demás que no niego su importancia, tal y como expresé anteriormente, en mi criterio es hacia adentro, hacia donde se encuentra el pueblo que día a día solo recibe maltratos y regaños; porque lo de afuera si logramos armonizar lo de adentro, podremos resolverlo de manera más expedita y por añadidura. Comprendo que para algunos que llevan tanto tiempo en su más de lo mismo, les será muy difícil entender lo que planteo; y entonces, para ellos en mi criterio muy personal, lo honrado y lo patriótico de que tanto se habla, sería hacerse a un lado definitivamente y abrirle paso a los que vienen detrás y son capaces de armonizar con el pueblo. Finalmente quiero afirmar, negando con todas las fuerzas de mi Ser Interior al espíritu de Saturno que devora a sus propios hijos, que estoy de acuerdo con alguien que aprecio mucho y que tiene obra concreta (1), cuando en una reciente entrevista televisiva suya dijo algo que me atrevo a parafrasear porque concuerdo plenamente con su contenido, en el sentido de que en el futuro inmediato será necesario confiar más en la población y hacer un pacto social para afrontar los crecimientos de visitas de todo tipo que nos deparan los nuevos tiempos que parece que estarán cargados de turistas que aumentarán nuestras ganancias por causa del incremento de la recaudación turística que ello implica. En este orden de pensamiento, afirmo que ¡Sin el pueblo no hay soluciones!...y que se equivocan los que consideren lo contrario. En esto como en otras ocasiones, reitero la frase evangélica de que ¡Quien tenga oídos para oír, oiga! Así lo pienso, y así lo afirmo con mis respetos para el pensamiento diferente y sin querer ofender a nadie en particular. fmederos@gmail.com (1) Me refiero al Historiador de La Habana, Eusebio Leal en una entrevista que por TELESUR, le realizó hace algunos días la periodista Cristina Escobar. Publicado en el periódico Por Esto!, de Mérida , Yucatán . México, El lunes 10 de agosto del 2015 http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=420271